Mahklas
Usuario Participativo
Fuente copia-pega:
http://www.genbeta.com/a-fondo/asi-...n-final-del-navegador-para-usuarios-avanzados
Un navegador no se convierte en "tu navegador" hasta que no lo tienes configurado a tu gusto, y el primer paso es el de tener todos los marcadores y plugins que tenías en el anterior. Por eso, como es normal, Vivaldi también tiene una sección para poder importarlos desde cualquier otro que tengamos instalado.
La buena noticia es que los marcadores se importan sin problemas en una nueva carpeta específica con el nombre del navegador del que vienen, por lo que con sólo 5 o 10 minutos reorganizándolos los podremos dejar a nuestro gusto. Una opción curiosa es que podrás elegir la carpeta que quieras como barra de marcadores, sólo tendrás que hacer click derecho sobre ella y elegir la opción.
Pero la mala noticia es que el proceso de importar contraseñas falla con las de Firefox, aunque las de Chrome me las ha importado sin problemas. Es un problema menor, pero para quienes tenemos contraseñas diferentes en múltiples páginas puede ser un poco tedioso tener que ir a Firefox cada dos por tres para buscarlas.
Vivaldi hace buena su promesa de dirigirse a los usuarios avanzados con una sección de opciones que va a requerir que le dediquemos un buen rato hasta dejarlo todo a nuestro gusto. Como ves en la imagen tenemos todas las opciones perfectamente catalogadas, con una última pestaña en la que se muestran todas juntas y un buscador en la parte superior para encontrar alguna en concreto.
No voy a entrar a describir una a una cada pestaña porque estaríamos hasta mañana, pero sí que diré que tenemos opciones para ajustar el aspecto de la UI o la página de inicio, cómo se colocan las estañas al abrirse, cómo interactuamos con la barra de direcciones, cómo se colocan los marcadores e incluso cómo se visualizan las páginas web.
También se pueden ajustar los parámetros de privacidad activando protecciones, solicitándole a las páginas no ser rastreado o ajustando la manera en la que interactuamos con las cookies. Tenemos a su vez secciones para configurar los comandos gestuales que podemos hacer con el ratón o los atajos del teclado.
Y por último están las extensiones y aplicaciones, que son las mismas que utiliza Chromium, y Vivaldi las busca e instala utilizando directamente la Chrome Web Store. Esto le facilitará mucho la vida a los usuarios de Chrome, aunque si llevamos tiempo utilizando alguna extensión exclusiva de Firefox quizá tengamos que buscar alternativas.
http://www.genbeta.com/a-fondo/asi-...n-final-del-navegador-para-usuarios-avanzados
Infinidad de opciones para ponerlo a tu gustoVivaldi 1.0 ha nacido con la intención de ser un navegador dirigido a los amantes de la tecnología, usuarios avanzados y todos los descontentos de que Opera decidiese cambiar su motor Presto de renderizado por Blink en 2013. Está basado en Chromium, es compatible con todas sus extensiones, y tiene unas cuantas funciones que lo hacen único en su especie. Aunque como es normal siendo su primera versión, aún hay cosas en las que puede mejorar.
¿Qué ofrece Vivaldi diferente a los demás?
Nosotros nos adaptamos al usuario, y por eso le proporcionamos un mayor control. Eso incluye poder colocar elementos como las pestañas en la parte superior, la inferior en la izquierda o la derecha del navegador.
También ofrecemos diferentes maneras de hacer una misma acción, ya sea con el ratón, diferentes combinaciones de teclas, menús, estos y comandos rápidos. Entre ellas será cada usuario el que decida cual es la más eficaz para él.
¿Qué añadidos no han llegado a tiempo y veremos en un futuro próximo?
Es evidente que podríamos seguir añadiendo características hasta el infinito, y seguiremos agregándolas. Hemos prometido añadir un soporte para correos electrónicos en el que hemos estado trabajando, y también opciones de sincronización. Estas serán añadidas en próximas versiones junto a una larga lista de otras características y opciones.
La personalidad de la que nos habla von Tetzchner la vemos en cuanto terminamos la instalación de Vivaldi y se nos abre una ventana configurar en tres pasos su aspecto inicial. En ellos elegimos elegimos su combinación de colores, la posición de la barra de pestañas, y el fondo de la página de inicio. Podéis estar tranquilos si creéis que no habéis elegido bien, puesto que estos parámetros se pueden cambiar después en cualquier momento.
En el primer vistazo a la interfaz de Vivaldi vemos aún más muestras de su carácter. En la parte izquierda de la pantalla tenemos una barra con los accesos directos a los marcadores, descargas y notas. Las notas son versátiles y pueden utilizarse para guardar ideas o anotarnos algo que nos ha gustado de una página web, ya que tienenentrada de URL, una larga descripción textual y la opción de tomar capturas de pantalla.
También hay un símbolo + para añadir paneles web. Son una especie de marcadores en los que en vez de abrirse una página a pantalla completa lo hace con su versión móvil en tamaño reducido ajustado al margen del panel. El tamaño lo podemos ajustar, de forma que esta utilidad se puede usar como un sistema de ventana partida dentro del propio navegador.
Con darle al + cuando estemos visitando una página esta se podrá añadir directamente al panel web, donde será útil tener herramientas como un buscador o un traductor. Algo que ayuda a sacarle el máximo provecho a los paneles es que al hacer click central sobre los enlaces que haya en ellos las páginas se abrirán directamente en una pestaña normal del navegador.
Esta es de hecho una de las funciones que más me han gustado del navegador, ya que me permiten poder buscar fuentes mientras trabajo en un artículo, buscar rápidamente el significado de una palabra en otro idioma o visitar mis feeds. Todo ello sin tener que abandonar la pestaña en la que estoy trabajando.
En la parte inferior de esta barra lateral nos encontramos con el botón de configuración, opción a la que iremos a fondo más adelante. También habrá otro que ocultará o mostrará el panel, de manera que si os molesta tener una barra lateral podréis ocultarla y sólo acceder a ella cuando queráis utilizar alguna de sus funciones.
Como en Firefox, en la parte superior tendremos una barra de direcciones y una secundaria de búsquedas. Pueden funcionar de forma independiente, por lo que aunque tengamos un motor de búsqueda por defecto podremos utilizar otro diferente en la secundaria. Cada motor, por cierto, tendrá su propio atajo rápido para cambiar rápidamente entre ellos.
A la izquierda de la barra de direcciones están los clásicos botones de avanzar, retroceder y refrescar. Junto a ellos hay otros dos de avance rápido y rebobinado, que al mantenerlos pulsados nos mostrarán una lista de las últimas páginas visitadas para elegir a cual volver. Junto a los botones de cerrar, modo ventana y minimizar veremos también una papelera, que también es un minihistorial con las últimas pestañas que hemos cerrado.
Por último, en la parte inferior nos encontraremos con opciones avanzadas. Con una de ellas cargaremos las páginas sin imágenes o sólo con las de caché, y con la otra de acciones habilitaremos el bloqueador de anuncios nativo, cambiaremos los colores de la web, lanzaremos el CSS Debugger y muchas otras cosas.
La buena noticia es que los marcadores se importan sin problemas en una nueva carpeta específica con el nombre del navegador del que vienen, por lo que con sólo 5 o 10 minutos reorganizándolos los podremos dejar a nuestro gusto. Una opción curiosa es que podrás elegir la carpeta que quieras como barra de marcadores, sólo tendrás que hacer click derecho sobre ella y elegir la opción.
Pero la mala noticia es que el proceso de importar contraseñas falla con las de Firefox, aunque las de Chrome me las ha importado sin problemas. Es un problema menor, pero para quienes tenemos contraseñas diferentes en múltiples páginas puede ser un poco tedioso tener que ir a Firefox cada dos por tres para buscarlas.
No voy a entrar a describir una a una cada pestaña porque estaríamos hasta mañana, pero sí que diré que tenemos opciones para ajustar el aspecto de la UI o la página de inicio, cómo se colocan las estañas al abrirse, cómo interactuamos con la barra de direcciones, cómo se colocan los marcadores e incluso cómo se visualizan las páginas web.
Y por último están las extensiones y aplicaciones, que son las mismas que utiliza Chromium, y Vivaldi las busca e instala utilizando directamente la Chrome Web Store. Esto le facilitará mucho la vida a los usuarios de Chrome, aunque si llevamos tiempo utilizando alguna extensión exclusiva de Firefox quizá tengamos que buscar alternativas.